Consejos para Comer bien en el Trabajo

Cuando se acaba el verano llega el final de las vacaciones muchas personas vuelven a las rutinas diarias de su trabajo y con esas rutinas llegan los malos hábitos alimenticios.

Muchos gente trabaja fuera de casa y no pueden acudir al hogar a preparar su comida así que, o bien comen de restaurante, menú o comida rápida o bien se llevan el famoso tupper

Lo de comer fuera de casa tantos días, con el estrés y las prisas propias del trabajo diario puede hacer que la vuelta al trabajo se convierta un cúmulo de malas opciones a la hora de alimentarse así que vamos a darte unos consejos para que tu vuelta al trabajo sea lo más saludable posible.

Cómo Comer Bien en el Trabajo

La alimentación, como todos sabemos, es muy importante y las malas costumbres alimentarias pueden llevarnos a tener problemas serios de salud ya que una mala alimentación nos puede producir riesgo de obesidad, desajustes hormonales, problemas de diabetes, aumento de peso, etc…

Sabemos que cuando se está en el trabajo no siempre uno puede elegir lo que se quiere comer o cuando se puede hacer así que muchas veces se recurre a la estrategia de comer lo que sea y cuando se pueda

Obviamente esto no es muy bueno para una alimentación equilibrada pero vamos a daros unos cuantos consejos sobre lo que podéis intentar evitar lo máximo posible para poder comer bien en el trabajo y adquirir hábitos saludables en nuestra alimentación mientras se trabaja.

No Comer Rápido

El comer rápido es quizás el error más común de los que tienen que alimentarse en el trabajo.

Muchos hemos leído u oído que la comida hay que masticarla bien ya que si comes muy deprisa puedes sufrir una indigestión o incluso provoca el sobrepeso.

Hace poso se ha descubierto, tras un estudio en el Hospital General Laiko de Atenas, que el comer rápido puede afectar a la liberación de ciertas hormonas intestinales que son la que se encargan de decirle a nuestro cerebro que deje de comer.

¿Qué quiere decir esto? Pues que si comes más deprisa de lo normal realizarás una ingesta más agresiva y en más cantidad de alimentos que si lo haces de manera pausada y por eso se puede tener una indigestión y llegar a provocar un aumento de peso.

No Comer a Deshoras

Aunque puede parecer algo imposible de realzar para alguien que, por ejemplo trabaja a turnos, es necesario recalcar que cada órgano de nuestro cuerpo tiene un reloj interno.

Al igual que cuando no dormimos bien por la noche al día siguiente estamos algo espesos, si no comes a tus horas habituales tu organismo se va a resentir.

No porque vaya a sentarte mal si no porque a ciertas horas tu cuerpo está más preparado a y protegido para una dieta con altos contenidos en grasas por lo que se aguantará mejor la subid de peso y el hígado sufrirá menos para digerirla.

No Comer Delante del Ordenador o TV

Esto es más que común y no sólo para la gente que trabaja con ordenadores y come delante de la pantalla de su PC.

Muchos somos los que nos ponemos a comer delante de la televisión mientras ves las noticias o cualquier otro programa.

Pues esta práctica además de ser la más común, es la que peores consecuencias nos puede acarrear según numerosos estudios e investigaciones.

Los mayores problemas de alimentarse delante de una pantalla son que comemos más, nos sentimos menos llenos y tenemos hambre antes.

¿Con esto que conseguimos? pues que la cantidad de alimentos que ingerimos sea mayor y que esta se torne más habitual.

Las potenciales distracciones que tenemos cuando estamos alimentándonos delante de una pantalla son capaces de cambiar nuestros recuerdos sobre lo que se ha comido o no además de tener unos efectos reales sobre la sensación de apetito que se tiene.

Otra cosa que se le aplica al hecho de comer delante del ordenador son los gérmenes que se pueden provocar.

Todos sabemos que el teclado de un ordenador es uno de los sitios con más gérmenes que te puedes encontrar así que si se come delante del ordenador todos los restos de comida y migas pueden ir ala parar al teclado y ese es el escenario perfecto para que proliferen…: Las bacterias.

La Comida Casera, la Mejor

Pues si, creo que todos sabemos que una buena comida casera es la que mejor sienta y la que más nos cuida a largo plazo.

El hecho es que cuando una persona cocina en casa, lo que cocina suele tener menos azúcar, menos grasas y menos hidratos de carbono.

También se evitan los alimentos excesivamente procesados, los congelados cambiándolos por productos frescos y más elaborados.

Cocinar en casa es sinónimo de poder gozar de tiempo para hacerlo y de poder elaborar los platos más saludables que podrás encontrar, comer más despacio y no hacerlo delante del ordenador.

Alimentos Recomendados para el Trabajo

Como no vivimos en los mundos de Yupi sabemos que muchas personas que trabajan les es imposible no comer fuera de casa tenemos unas recomendaciones para que, al menos siempre que puedas, te los lleves al trabajo para comer ya que no se tiene que preparar ni se requieren tuppers

• Come Yogures Probióticos
  Los yogures probióticos te ayudan a tener una buena digestión y protege algo el organismo además de ayudar a reducir el riesgo de padecer diabetes tipo 2.
  Además con sólo 250ml te meterás en el cuerpo 40mg de calcio, el mismo potasio que si te comieras un plátano y las mismas proteínas de un huevo.
• Barritas Energéticas
  A mucha gente no le gustan pero en algunas situaciones es posible que te sean de provecho. El muesli tiene vitamina B1 con lo que te ayuda a reducir el nivel de estrés y la B2 te ayuda con muchas otras cosas.
• Nueces y demás Frutos Secos
  Es muy común pensar que comer frutos secos nos engorda pero si se hace de manera moderada no hay problema, piensa que entre el 10 y el 20% de la materia grasa de un fruto seco nunca llegará a nuestra sangre.
  El mejor fruto seco son las nueces así que no hay problema en consumirlas además que mejoran el humor y de ayudan a no padecer enfermedades relacionadas con el corazón.
• Las Frutas bien pero no Todas
  El consumo de frutas es muy bueno ya que nos aportan antioxidantes y vitaminas pero si estás intentando reducir el consumo de azúcar lo mejor es que evites comer muchos plátanos, manzanas o cerezas. Si te comes un plátano no te va a dar un ataque de azúcar pero hay que tenerlo en cuenta.
• Los Zumos no Naturales – Cuidado
  Prepararse un zumo recién exprimido y natural es prácticamente imposible así que si tienes que comprar envasados busca los que digan que son 100% exprimidos.
  Los concentrados son los menos saludables así que evítalos siempre que puedas.